FORESTACIÓN
Historia
Cuando el Colegio De la Inmaculada se trasladó a Santiago de Surco, la ladera del cerro colindante era una zona agreste, con cerros desnudos y poca vegetación. De este modo, inspirados en la milenaria andenería inca y aprovechando los movimientos de tierra realizados para construcciones cercanas, se consiguió el relleno de las áreas de menor declive con una alfombra de tierra fértil, que serviría para la construcción de plataformas en diversos niveles. La tierra apta para sembrío fue esparcida en las laderas y así, combinada con regado por aspersión y regado por goteo, fue cambiando la cara del árido cerro hacia un paisaje con vegetación.
Propósito
Hoy en día, los estudiantes gozan de ambientes donde florecen diversos árboles frutales como paltos, chirimoyos, naranjos y pecanos, así como higueras y olivos en los niveles más altos del cerro. Sin embargo lo más importante es brindar un pulmón a la ciudad y continuar enseñando con el ejemplo; tanto a los estudiantes del colegio como a la comunidad en general, que los cambios positivos sí son posibles.